Para ser el “modelo de ciudad”, es decir: la idea de lo que debe ser la ciudad, el espejo, la referencia, lo que se quiere conseguir, la ciudad ideal, el Valladolid futuro… Para presentar en 12 puntos lo fundamental del proyecto de ciudad que dicen enarbolar, parece que se han olvidado de algo: no hay ni un solo apartado que haga referencia a la política social. Nada. Cero.

Puede ser por alguna de estas tres razones: 1) Porque no se han dado cuenta. Dan muchísima importancia a esta cuestión, pero con las prisas se les ha pasado. 2) Porque piensan que no hay nada que mejorar. Que lo que hace el actual gobierno es insuperable. 3) Porque les da igual. No conceden ninguna importancia a la política social, por muchos aspavientos que hagan en los plenos. Pues lo cierto, repito, es que este tema no figura entre las 12 cuestiones principales.

Yo creo que son ciertas las tres hipótesis. Sorprende, desde luego, que en ese curioso “modelo” que plantean se hable de construir varios equipamientos, de la inteligencia artificial (ChatGPT al poder, claro que sí), del talento y de las mascotas; y que no se diga ni una palabra, por ejemplo, de la vivienda. Pero es que… tengamos las cosas claras. Si hay que hablar de derechos, nada de derechos sociales: lo que importa es el “derecho al soterramiento” (un gran hallazgo en materia de derechos; aplicable, por supuesto, a todas las ciudades con tren en Castilla y León y a todas las del mundo por las que pase un tren: pues se trata, no lo olvidemos, de un derecho “irrenunciable”).

En fin: un modelo modélico, no cabe duda.