Probablemente la torre del sociólogo escocés Patrick Geddes en Edimburgo (Outlook Tower) sea una de las más celebradas. Este autor, armado de un enorme empeño educativo, compró y renovó en 1892 ese edificio, situado cerca del castillo, para convertirlo en un «lugar de perspectiva y un tipo-museo como clave para una mejor comprensión de Edimburgo y su región, (…) y ayudar a las personas a tener una idea clara de su relación con el mundo en general”. Desde entonces la idea de constituir “observatorios” diversos, especialmente sobre temas sociales y culturales, se ha extendido sin tregua. (Abajo: sección vertical, la torre en la actualidad, Geddes y otro observatorio: el Real Observatorio de Madrid).
Desde entonces, en muchos lugares se han propuesto lugares de observación, estudio y análisis de la realidad. Por ejemplo, los observatorios de la vivienda. Como el Housing Observatory de Luxemburgo (creado en 2003, en el Ministerio de Vivienda, y concebido para la planificación de la política de vivienda. “Sus tres tareas principales son la recopilación, el análisis y la difusión de datos. Cada 6 meses se publican notas y series de indicadores anuales”). El International Observatory on Social Housing. O el European Observatory on Homelessness. O centros de estudio y difusión, como las publicaciones del Instituto Municipal de la Vivienda y Rehabilitación de Barcelona. El Observatori Metropolità de l’Habitatge de Barcelona. El Observatorio de la Vivienda de Vitoria-Gasteiz.
O, el que considero más útil, el Observatorio Vasco de la Vivienda. Solo en el último trimestre han hecho pública la Estadística de viviendas iniciadas y terminadas (3er trimestre 2021), el Informe de la Oferta Inmobiliaria, el Informe de Evaluación Integral de las Políticas de Vivienda (2018-2020), el Informe de la dinámica y perspectiva de la situación del mercado inmobiliario del 3er trimestre de 2021; y el resumen de la Jornada Plan Director de Vivienda 2021-2023. (Abajo: imágenes del Instituto M. de la Vivienda y R. de Barcelona y mapas del Observatorio de Vitoria).
En Valladolid se cuenta con el Observatorio Urbano, en el que, además de datos estadísticos (demográficos y socioeconómicos, fundamentalmente) se ofrecen también estudios y análisis de diversas variables de interés. Y se indica que “su contenido tiene vocación de crecimiento y de actualización permanente”. Características de la población, del mercado de trabajo, de la renta y actividad económica (incluso presupuestos municipales). Fichas territoriales e indicadores. Informaciones del coste de los servicios.
En materia de vivienda se cuenta con información sobre las características de los edificios, de los hogares y de las viviendas. También de las licencias concedidas. Pero sin suficiente actualización (hay más datos, y más actualizados, en el ISAU: Informe de Seguimiento de la Actividad Urbanística, que se presenta en el Pleno cada año). Pero se trata de una información insuficiente para conocer, con la suficiente actualidad, la situación y las tendencias de las demandas y necesidades de vivienda. Se han realizado estudios específicos para la elaboración de los planes de vivienda de 2017 y 2021. Y algunos de los capítulos tienen vigencia de varios años. Pero en otros es importante contar con el seguimiento de los datos y el análisis de su evolución, en secuencias más cortas (como mínimo semestrales). (Abajo: dos imágenes del documento de trabajo del Plan de Vivienda de Valladolid).
En consecuencia, el propósito en este punto será poner en marcha un Observatorio de la Vivienda suficiente para disponer de informes semestrales de situación y análisis de la evolución (mercado y necesidades).
(Imágenes del encabezamiento: representaciones de la Outlook Tower del libro Cities in Evolution, 1915; recogidas de elblogdefarina.blogspot.com/2011).